Una visita a Brihuega y sus campos de lavanda

¿Te gustaría ver un espectáculo de color y aroma en plena naturaleza? ¿Te apetece conocer un pueblo con encanto e historia en la provincia de Guadalajara? Entonces, no te pierdas una visita a Brihuega y sus campos de lavanda, un plan perfecto para disfrutar este verano.

Brihuega es una localidad situada a unos 100 kilómetros de Madrid, en la comarca de la Alcarria. Es conocida como el jardín de la Alcarria por su riqueza paisajística y botánica. Además, tiene un importante patrimonio histórico y cultural, que le ha valido el título de Conjunto Histórico-Artístico.

Pero lo que hace realmente especial a Brihuega es que alberga uno de los mayores cultivos de lavanda de Europa, con más de mil hectáreas dedicadas a esta planta aromática. Cada año, entre junio y julio, los campos se tiñen de un intenso color morado y desprenden un olor embriagador que atrae a miles de visitantes.

Cómo llegar a Brihuega y sus campos de lavanda

Para llegar a Brihuega desde Madrid, hay que tomar la A-2 dirección Zaragoza y salir por el kilómetro 73 hacia la CM-2011. Después, hay que seguir por la CM-200 hasta llegar al pueblo. El trayecto dura aproximadamente una hora y media.

Para ver los campos de lavanda, hay que salir del pueblo por la CM-2005 dirección Sigüenza/Almadrones. A unos 5 kilómetros se encuentran los campos más espectaculares y extensos, donde hay habilitado un parking gratuito y unas casetas de información1. También hay otros campos más pequeños en las proximidades del pueblo, como los que se ven desde el mirador del cementerio o los que rodean el castillo.

Cuándo ver los campos de lavanda en floración

La mejor época para ver los campos de lavanda en floración es entre mediados y finales de julio, cuando el color morado es más intenso y la planta está lista para ser cosechada. La fecha exacta puede variar según las condiciones climáticas del año, por lo que conviene consultar las redes sociales o la web oficial del Ayuntamiento de Brihuega antes de ir2.

Además, durante el mes de julio se celebra el Festival de la Lavanda, un evento que combina música, gastronomía y naturaleza en un entorno único. Se trata de una serie de conciertos al aire libre entre los campos de lavanda, con artistas nacionales e internacionales. También se organizan visitas guiadas, talleres, degustaciones y otras actividades relacionadas con la lavanda.

Qué ver en Brihuega

Brihuega no solo ofrece la belleza de sus campos de lavanda, sino también la de su casco histórico, declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1973. Entre sus monumentos más destacados se encuentran:

  • El castillo de la Piedra Bermeja, una fortaleza árabe del siglo X que domina el pueblo desde lo alto de una roca. Se puede visitar su patio de armas, su torre del homenaje y sus murallas.
  • La iglesia de Santa María de la Peña, una joya del románico del siglo XIII que conserva una portada con arquivoltas decoradas y un ábside semicircular.
  • La iglesia de San Felipe, un templo gótico del siglo XIV que alberga el museo de miniaturas del profesor Max, una curiosa colección de obras de arte en miniatura realizadas por el artista alemán Max Neupert.
  • La iglesia de San Miguel, una construcción barroca del siglo XVIII que destaca por su fachada de ladrillo y su torre campanario.
  • El arco de Cozagón, una de las puertas de entrada al recinto amurallado, que data del siglo XII y tiene un arco apuntado con dovelas de piedra.
  • Los jardines de la Real Fábrica de Paños, unos bellos jardines del siglo XVIII que pertenecieron a una antigua fábrica textil fundada por Carlos III. Cuentan con fuentes, estanques, esculturas y una gran variedad de plantas y flores.

Dónde comer y dormir en Brihuega

Brihuega ofrece una buena oferta gastronómica y hotelera para los visitantes que quieran pasar más de un día en el pueblo. Entre los platos típicos de la zona se encuentran el cordero asado, las migas, las gachas, el pisto, el queso de cabra y la miel. Algunos de los restaurantes más recomendados son El Molino de los Secretos, La Alcarria, El Rincón del Arco y La Granja.

Para alojarse, hay varias opciones de casas rurales, hoteles y hostales con encanto. Algunos de los más destacados son el Hotel Spa Niwa, el Hotel Hospedería Princesa Elima, el Hotel Rural Los Ánades y el Hotel Palacio de Iván Tarín.

Conclusión

Una visita a Brihuega y sus campos de lavanda es una experiencia inolvidable que te hará sentir como en un cuento. Podrás disfrutar de un espectáculo natural único, de un pueblo con historia y encanto, y de una gastronomía y una cultura locales que te sorprenderán. No lo dudes y ven a conocer Brihuega, el jardín de la Alcarria.