Hola, soy Ana y quiero compartir con vosotros mi experiencia de viajar a Vidago, un pequeño pueblo portugués famoso por sus aguas termales y su belleza natural. Vidago está situado en el norte de Portugal, cerca de la frontera con España, y es un destino ideal para desconectar del estrés y disfrutar de la tranquilidad y el bienestar. En este artículo os voy a contar qué ver y hacer en Vidago, dónde alojarse, cómo llegar y qué comer. ¡Espero que os guste!
Qué ver y hacer en Vidago
Vidago es un pueblo con mucho encanto, rodeado de verdes montañas y bosques. Su principal atractivo son sus famosas termas, que datan del siglo XIX y que tienen propiedades curativas para la salud. Las termas se encuentran en el Parque de Vidago, un precioso parque con árboles centenarios, fuentes, lagos y senderos. Allí se puede disfrutar de un circuito termal con piscinas, jacuzzis, saunas y duchas de contraste, así como de tratamientos de hidroterapia, masajes y estética. El parque también alberga el Vidago Palace Hotel, un impresionante hotel de lujo que fue construido en 1910 para alojar a la realeza portuguesa. El hotel tiene un estilo neoclásico y está decorado con elegancia y glamour. Cuenta con un restaurante gourmet, un spa, una piscina exterior y un campo de golf de 18 hoyos.
Otra actividad que se puede hacer en Vidago es visitar el Boticas Parque, un parque natural que se encuentra a unos 15 minutos en coche del pueblo. El Boticas Parque es un espacio dedicado a la conservación de la biodiversidad y la educación ambiental. Allí se puede observar la fauna y la flora autóctonas, como lobos ibéricos, ciervos, jabalíes, águilas o buitres. El parque también ofrece actividades como senderismo, ciclismo, tiro con arco o paintball.
Por último, no hay que perderse el centro histórico de Vidago, donde se puede pasear por sus calles empedradas y admirar su arquitectura tradicional. Algunos lugares de interés son la Iglesia Matriz de Nossa Senhora da Conceição, el Palacio de los Condes de Ourém o la Plaza de Camoes, donde se encuentra el Ayuntamiento y una bonita fuente.
Dónde alojarse en Vidago
Como os he dicho antes, el Vidago Palace Hotel es una opción excelente para alojarse en Vidago si se busca lujo y exclusividad. El hotel tiene 70 habitaciones con todo tipo de comodidades, como aire acondicionado, TV satélite, minibar o caja fuerte. El precio medio por noche es de 113 €, lo que incluye el desayuno buffet y el acceso al spa y al campo de golf.
Si se busca algo más económico pero igualmente confortable, el Primavera Perfume Hotel es una buena alternativa. Este hotel tiene 3 estrellas y está situado a unos 10 minutos a pie del Parque de Vidago. Tiene 32 habitaciones con baño privado, aire acondicionado, TV y wifi gratis. El precio medio por noche es de 42 €, lo que incluye el desayuno continental.
Otra opción más rural es alojarse en la Quinta do Olival, una casa rural que se encuentra a unos 20 minutos en coche de Vidago. Esta casa tiene 6 habitaciones con baño privado, calefacción y TV. También tiene una cocina compartida, una sala de estar con chimenea y una terraza con vistas al campo. El precio medio por noche es de 50 €, lo que incluye el desayuno casero.
Cómo llegar a Vidago
Vidago está bien comunicado por carretera con las principales ciudades portuguesas y españolas. La forma más cómoda de llegar es en coche propio o alquilado. Desde Oporto se tarda unas 2 horas por la autopista A7; desde Lisboa unas 5 horas por la A1 y la A24; desde Madrid unas 6 horas por la A-6 y la A-52; y desde Vigo unas 2 horas por la A-52.
También se puede llegar en transporte público desde Oporto o Vigo. Desde Oporto hay que tomar el tren regional hasta Chaves (unas 3 horas) y luego el autobús hasta Vidago (unos 20 minutos). Desde Vigo hay que tomar el autobús hasta Verín (unas 2 horas) y luego otro autobús hasta Vidago (unos 30 minutos).
Qué comer en Vidago
Vidago tiene una gastronomía típica del norte de Portugal, basada en productos locales como la carne, el pan o el vino. Algunos platos que hay que probar son el cocido barrosão (un guiso de carne de ternera con verduras), el presunto (jamón curado), el folar (un pan dulce relleno de carne), el pastelón (una empanada rellena de carne picada) o los pasteles de Chaves (unos hojaldres rellenos de carne). Para beber hay que probar el agua mineral natural de Vidago o los vinos verdes o maduros de la región.
Resumen
Vidago es un pueblo portugués que ofrece relax y naturaleza a sus visitantes. Su principal atracción son sus termas, donde se puede disfrutar de un circuito termal o de tratamientos de salud y belleza. También se puede visitar el Parque de Vidago, donde se encuentra el Vidago Palace Hotel; el Boticas Parque, donde se puede observar la fauna y la flora locales; o el centro histórico del pueblo, donde se puede pasear por sus calles empedradas. Para alojarse hay varias opciones para todos los gustos y bolsillos: desde hoteles de lujo hasta casas rurales. Para llegar se puede ir en coche o en transporte público desde Oporto o Vigo. Y para comer hay que probar los platos típicos del norte de Portugal.
